En la cocina solemos usar cualquier tipo de producto para limpiar, siendo muchos de ellos muy abrasivos. Por ello, hoy te damos algunos consejos de mantenimiento por partes para que sepas cómo hacerlo para no dañar los materiales de tu cocina nueva.
Para limpiar partes de madera o chapa en tu cocina nueva
Por lo general, es suficiente utilizar un paño húmedo para limpiar estas superficies, que luego secaremos cuidadosamente con un tapo seco. En el caso de una mancha, lo mejor siempre es usar jabones neutros que no sean demasiado agresivos y que puedan dañar el material o la pintura. Están totalmente desaconsejados productos como acetona, amoníaco o alcohol, ya que son muy corrosivos.
Otro consejo importante es siempre secar bien todas las zonas de la cocina, para evitar problemas con las pinturas o la humedad.
¿Cómo limpiar mejor el laminado plástico, polimético o melamínico?
En este caso es ideal la tela de microfibra con agua caliente y jabones neutros. Después de limpiar es necesario enjuagar las superficies. Igual que en el caso anterior no usaremos productos agresivos o desengrasantes o esponjas duras que pueden rayar el material.
¿Cómo conseguir el mejor resultado en mi encimera nueva?
Las encimeras laminadas, sintéticas y azulejadas se limpian simplemente con un paño suave, mojado y bien escurrido. En presencia de manchas, se puede añadir un detergente líquido común, en lo posible neutro o específico para la superficie a tratar. Evitar, con todo tipo de material, productos muy abrasivos o con contenido de sustancias agresivas como lejía. Lo que sí es recomendable de vez en cuando, sobre todo en encimeras de acero inoxidable, es el gel antical para deshacerse de esas molestas manchas que se forman por la cal del agua.
Si lo vas a limpiar con el estropajo de la cocina, utiliza siempre la parte de la esponja bien bañada en jabón. Quedará impecable sin necesidad de rayar la superficie utilizando la parte dura.
Para limpiar las superficies de mármol, granito y aglomerado utilizar simplemente agua y jabón, evitando el uso de detergentes no específicos; es importante eliminar la suciedad de inmediato, con la mancha aún fresca, porque en poco tiempo las sustancias pueden penetrar en los poros del material y ser absorbidas. En caso de aureolas o manchas (tipo cal) es necesario frotar la superficie con una mezcla de bicarbonato y agua, dejar actuar unos minutos y limpiar con una esponja común mojada. Además, es muy importante renovar periódicamente el tratamiento impermeabilizante con los productos específicos.
¿Cuál es la mejor manera de dejar mi fregadero impecable?
Para saber cómo tratar los diferentes materiales de los fregaderos (acero o resinas sintéticas como fragranite, cristalite o ekotek) puedes seguir las mismas pautas que hemos dado para las encimeras, por lo general una esponja con jabón líquido será suficiente.
Para un mantenimiento correcto del fregadero y que tenga una vida muy larga, te recomendamos que no dejes abiertos los envases de detergentes u otros productos químicos de composición ácida bajo el fregadero, a fin de evitar la oxidación o corrosión provocada por las exhalaciones.